Si terminamos de acotar un plano, y tenemos que cambiar
las propiedades o el estilo de las cotas, no es necesario repetir todo
el trabajo, podemos editar una cota
para modificarle las propiedades como hacíamos con cualquier objeto.
Al editar una cota modificamos sus propiedades, líneas extremos,
textos, etc. Pero mucho más lógico es diseñar nuestro
estilo de cota
y lo guardamos. Cada vez que lo necesitemos lo importamos (por ejemplo
con el Design Center), y nos ahorramos todo el trabajo de ajustar las
variables para cada proyecto. Podemos crear nuevos estilos y ponerle nombres
para identificarlos, así generamos una librería de estilos,
y la próxima ves ahorramos mucho tiempo.